Este miércoles 2 de marzo de 2022, luego de las 11,00 llegó el féretro del alcalde de Loja, Jorge Bailón Abad, hasta el Salón del Cabildo del Municipio, donde se levantó una capilla ardiente para rendirle un homenaje póstumo a la primera autoridad del cantón, quien falleció el pasado martes 1 de marzo a las 18:30, a causa de un paro cardiaco.

Homenaje

Una vez en el Municipio, fue recibido con aplausos de sus seguidores y jefes departamentales, al igual que el personal que labora en la institución. Los primeros en tomar el féretro fueron el coordinador del Municipio, Efraín Muñoz; el director de la UCOT, Paúl Aguilar; el concejal Nixon Granda, entre otros allegados.

Los concejales, al igual que los jefes departamentales, le hicieron la calle de honor a su ingreso. La nueva alcaldesa, Patricia Picoita, mencionó: “es un momento difícil y complejo, no voy a dar declaraciones, todavía no estoy en funciones, eso sucederá después de su sepelio por respeto a la exautoridad”, declaró.

El concejal Patricio Lozano realizó el homenaje póstumo, quien hizo llegar las condolencias de parte del Cabildo a su esposa, Cecilia Moscoso, sus hijos, nietos y demás familiares. Asimismo, declaró que, mediante consenso, el Cabildo declaró tres días de luto a nivel cantonal y la suspensión de eventos culturales y sociales durante estos días en memoria de Jorge Bailón Abad. “A Bailón lo recordarán por dos obras magníficas, el proyecto Regenerar y los programas de vivienda social. No le decimos adiós, sino hasta luego Jorge”, concluyó.

Cecilia Moscoso, esposa del fallecido, pidió la palabra para agradecer a los lojanos por la confianza prestada para que en el 2019 vuelva por tercera ocasión a la Alcaldía de Loja. Se despidió aduciendo que era un hombre amable, honrado, lleno de ética y trabajador. “Estuvo siempre ligado a sus principios, gracias Loja, creo que la misión está cumplida, los que nos quedamos tenemos muchas enseñanzas de rectitud, lealtad, amor y trabajo”, recalcó.

Sepelio

Sus restos, pasadas las 16:00, fueron trasladados hasta las instalaciones del Camposanto Jardines del Zamora, donde luego de la eucaristía y acto de despedida fue sepultado.